Foto: CUARTOSCURO
Durango es conocido por ser de la oposición ya que nunca ha sido gobernado por otro partido que no sea el PRI y el PAN.
Y no es diferente a nivel local, al menos en los municipios más grandes e importantes a nivel electoral. En el caso de Lerdo, por ejemplo, es el tercer municipio con la lista nominal más grande del estado, detrás de Durango (1) y Gómez Palacio (2).
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Ya sea en alianza o candidatura única, en los últimos 80 años, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha ganado 30 veces la presidencia municipal de Lerdo; mientras que el PAN ha ganado tres veces con algún candidato propio.
El PRI es la principal fuerza política en Lerdo
De 1941 a 1994, el PRI tuvo una racha de 23 elecciones ganadas en el municipio, hasta que el PAN logró arrebatarle el mando en 1995, con Rosario Castro Lozano como su candidata. No sólo hizo historia al ser la primera presidenta municipal de un partido alterno al PRI, sino que además, se convirtió en la primera mujer que ocupaba dicho cargo en el estado.
El PAN logró ganar por segunda vez las elecciones locales del municipio; sin embargo, en el 2001, el PRI retomó el cargo tras vencer a Manuel Salazar Campos, quien habría sido acusado por el PRI de realizar proselitismo días antes de la elección, rompiendo la veda electoral.
Aunque el PAN había salido mal parado, en 2004, Rosario Castro Lozano decidió volver a contender por la presidencia de Lerdo y ganó con un amplió margen, siendo esta la última vez que el PAN ganó, por sí solo, una elección municipal en la región.
Desde 2007 hasta la actualidad, el PRI ha logrado mantenerse en el poder; sin embargo, ha sido necesario aliarse con otros partidos políticos para garantizar su permanencia.
Ese año, el PRI formó una alianza con el Partido Nueva Alianza y el Partido Duranguense, la cual resultó muy favorable. Posteriormente, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) también se unió a esta coalición en 2010 y 2013.
En años posteriores, el PRI decidió confiar en sus propios candidatos y competir en solitario, logrando victorias con candidatos propios en 2016 y 2019. Sin embargo, en las elecciones de 2022, se alió con sus históricos opositores, el PAN y el PRD para derrotar a un nuevo enemigo en común: Morena. Esta coalición permitió al PRI mantener a Lerdo dentro de sus filas.