
Foto: Cuartoscuro
El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México descendió al puesto 35 en el ranking global de OAG, perdiendo terreno frente a Bogotá y otros hubs de la región.
El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) sufrió un fuerte retroceso en el listado de los aeropuertos mejor conectados del mundo, elaborado por la consultora británica OAG.
No solo te informamos, te explicamos la política. Da clic aquí y recibe gratis nuestro boletín diario.
En la edición 2025 de su informe Megahubs, la terminal capitalina se ubicó en el puesto 35, lo que representa una caída de 20 posiciones en comparación con el lugar 15 que ocupaba hace apenas seis años.
El propio ranking muestra que en el último año el AICM también perdió tres lugares, pues pasó de la posición 32 a la 35, mientras aeropuertos como Doha, San Francisco y Riyadh escalaron al mejorar su conectividad internacional.
Según explica OAG, “estos rankings únicos se generan comparando el número de conexiones programadas hacia y desde vuelos internacionales con el número de destinos servidos desde el aeropuerto”.
De acuerdo con un análisis de El Financiero, la pérdida de posiciones del AICM responde a múltiples factores, pero destaca el impacto de las políticas impulsadas durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
“Desde 2019, el AICM ha perdido capacidad de horarios por decretos presidenciales que no solo han traído un menor flujo de viajeros desde el extranjero, sino que influyó también en el ‘truene’ de la alianza entre Delta y Aeroméxico”, señala el medio.
Uno de los cambios más relevantes fue la reducción de 61 a 43 operaciones por hora —posteriormente ajustada a 44—, lo que disminuyó la competitividad del aeropuerto frente a otros hubs que buscan atraer conexiones internacionales.
Entre 2019 y 2024, el AICM perdió más de 500 mil pasajeros internacionales, una muestra clara de la reducción de rutas y frecuencias.
Esta caída provocó que la terminal capitalina perdiera su liderazgo en América Latina, donde el Aeropuerto El Dorado de Bogotá se consolidó como el principal centro de conexiones de la región.
Además, la disminución en la red doméstica mexicana —que alimenta a las aerolíneas internacionales con pasajeros en conexión— debilitó todavía más la posición del AICM frente a aeropuertos como Punta Cana y Panamá, que han ganado terreno como hubs alternativos para el mercado latinoamericano.
El retroceso ocurre en un momento en que el AICM se encuentra en plena remodelación de cara al Mundial 2026, lo que plantea el reto de recuperar conectividad y competitividad en un escenario cada vez más disputado.
Mientras terminales de Medio Oriente, Asia y Europa fortalecen sus redes globales, el aeropuerto más importante de México enfrenta la necesidad de redefinir su papel como punto de conexión regional, en un contexto donde la política aeroportuaria sigue marcando la pauta de su desempeño.